El Traductor profesional se caracteriza por la habilidad de transcribir mensajes escritos de una lengua a otra con fidelidad, manejando los léxicos y estilos requeridos. Además, demuestra un alto nivel de dominio de sus lenguas de trabajo y posee amplios conocimientos extralingüísticos y culturales, con una constante conciencia de la necesidad de actualización permanente.
Competencias profesionales
A) Traducción
· Comprender y transmitir el sentido de un mensaje escrito de una lengua a otra con fidelidad
· Utilizar las herramientas computacionales y las fuentes de información más adecuadas disponibles
En el dominio de la Traducción, el traductor profesional debe tener la habilidad de reconocer y cumplir con las etapas del proceso traductor y ser capaz de resolver los problemas de dicho proceso. Para desarrollar esta tarea debe demostrar competencia, a nivel profesional, en las siguientes áreas: comunicación escrita, análisis pragmático y contrastivo, técnicas de expresión y dominio de diferentes códigos culturales, tanto en la lengua origen como la lengua meta.
B) Comunicación
· Expresarse con fluidez en forma oral y escrita en las lenguas que utiliza profesionalmente
En el dominio de la Comunicación, el traductor como mediador lingüístico y cultural, posee los conocimientos de las lenguas y elementos culturales que le permiten actuar en situaciones comerciales o de otra índole, tales como la interacción con clientes extranjeros y con interlocutores de otros países dentro del trabajo diario en cualquier sector laboral.
C) Interpretación
· Interpretar de una lengua a otra información auditiva con exactitud
El traductor, en su función de intérprete debe demostrar dominio profesional en competencias comunicativas y en sus lenguas de trabajo, conocimientos extralingüísticos, capacidad de oratoria y habilidades cognitivas necesarias para el proceso traslativo oral.
D) Investigación
· Aplicar metodologías de investigación lingüística y de traducción
El proceso de la investigación requiere partir de la propia curiosidad intelectual, la que se demuestra a través de la localización, selección, procesamiento y sistematización de la información. El traductor debe tener una perspectiva metodológica capaz de dar coherencia y rigor científico a las modalidades de trabajo propias de sus labores.
Competencias transversales
- Demostrar comportamiento ético-moral en el desempeño profesional y personal
- Demostrar espíritu crítico constructivo
- Establecer una adecuada comunicación interpersonal
- Realizar trabajo en equipo
- Autogestionarse profesionalmente
- Perfeccionarse continuamente como profesional